Más allá de que saltear escenas, que seguramente no sería agradable para el director del filme, no es igual ver el producto acelerado que completo. ¿Cómo incide este nuevo hábito en la comprensión de un contenido y en la salud mental?
Una costumbre muy actual es reproducir los audios de WhatsApp de forma acelerada, a velocidad x1.5 o x2.Esto también ocurre con los videos, podcasts y hasta con los últimos capítulos de la serie que se desea terminar de ver.
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Esta tendencia reciente, conocida por su término en inglés, speedwatching, es mucho más frecuente entre los jóvenes y adolescentes, aunque todos los sectores de la población suelen recurrir a ella.
La licenciada María Paula Castro, explicó que “el speedwatching surge como un síntoma de la cultura de la inmediatez en la cual los tiempos de espera desesperan. Vivimos en un mundo con sobredosis de información atractiva, lo que nos genera ansiedad y deseamos absorber la mayor cantidad de esa información en el menor tiempo posible”.
Distintas aplicaciones tales como WhatsApp o Telegram, redes sociales como TikTok, y los podcast o plataformas de cine y series ofrecen entre sus funciones la opción de incrementar la velocidad del contenido de 1x hasta 1.25x, 1.5x e incluso 2x.
Consumo
Esta herramienta ideal para ansiosos utilizada también para el consumo de audios, videos y conferencias que los estudiantes utilizan en su etapa educativa.
Para la licenciada Castro, “acelerar la velocidad de reproducción de mensajes, videos o podcasts, puede ser una herramienta muy útil si pensamos en términos pragmáticos.
Al acelerar el contenido y quedarnos con las ideas principales, optimizamos el tiempo y entrenamos el cerebro para incorporar estímulos a gran velocidad. Ahora bien, la velocidad puede ir en detrimento de la calidad o del detalle”.
Cuáles son las causas de su uso para la salud mental
Entre los factores que explican se destacan el estrés, la falta de tiempo, la ansiedad o el miedo a “perderse algo” en las redes conocido como el fenómeno FOMO, por sus siglas en inglés.
Según Google y Alphabet, los usuarios de YouTube ahorraron un promedio de más de 900 años de tiempo al mirar videos a velocidades más rápidas.
“Aunque a muchos de nuestros usuarios les encanta esta función, para algunos la velocidad todavía no es lo suficientemente alta.
Incluso hemos recibido solicitudes para agregar velocidades de reproducción de 3x, 3.5x y 4x”, destacaba Neal Mohan, director de producto de YouTube en 2022.
Y en el caso del podcast, sucede un comportamiento similar. Según las estadísticas del consumo de podcast en español de 2023 publicadas por la plataforma iVoox, la mayoría de la población consume a velocidad normal los podcasts, sin embargo, el 10,48 % los escucha de forma acelerada.
¿Cuáles son las consecuencias de esta tendencia de consumo?
La estimulación rápida y permanente genera una gratificación en el cerebro y no requiere tanto esfuerzo mental.
“La retención y comprensión de la información permite interiorizarla y desarrollar sobre esta base la capacidad crítica, pero con el consumo acelerado estamos anulando esa capacidad, así como la atención o la gestión de los tiempos de espera”.