Las mujeres embarazadas presentan múltiples síntomas durante el periodo de gestación, pero uno de los más interesantes son los antojos de alimentos, ya sean dulce, ácidos, salados, entre otros.
Curiosidades. Según un estudio reveló que los antojos en el embarazo no son un capricho, si no el cambio de los mecanismos neuronales del circuito de la ingesta y la recompensa, por otro lado, estos pueden acarrear riesgos para la salud si deja de ser una conducta ocasional y se convierte en un hábito.
De igual manera, muchas mujeres experimentan estas ganas casi compulsivas de un alimento específico. Una situación que podría resumirse en una necesidad de despertarse a la medianoche ante la necesidad imperante de un plato puntual.
Asimismo, esta conducta fue analizada por un estudio científico que determinó que durante el embarazo se despiertan circuitos neuronales relacionados con el deseo y la motivación, los cuales impulsan a las embarazadas a comer alimentos dulces y calóricos.
ADEMÁS: Descubre cuál es la serpiente más venenosa del mundo
PUEDES LEER: ¿Sabes por qué el cambio climático detiene la llegada del invierno?
En este sentido, un equipo de investigadores del Instituto de Investigación Biomédica Pi i Sunyer (Idibaps) del Hospital Clínic de Barcelona, demostró que comer alimentos más calóricos durante el embarazo puede afectar a la descendencia, aumentando la probabilidad de trastornos alimentarios y metabólicos en los hijos.
Por otro lado, durante el embarazo el cerebro experimenta cambios en las conexiones funcionales de los circuitos de recompensa, así como de los centros gustativos y sensoriomotores.
Además, el estudio también demostró que esos antojos persistentes tienen efectos duraderos para la descendencia, particularmente en los hijos varones, lo que puede conducir a la intolerancia a la glucosa, aumento del peso corporal, aumento de la susceptibilidad a desarrollar trastornos alimentarios y comportamientos similares a la ansiedad durante la edad adulta.
Por consiguiente, los antojos durante el embarazo es un mecanismo asociado a cambios en el sistema de recompensa. Estos descubrimientos, además, pueden contribuir a mejorar las guías nutricionales para las mujeres gestantes.
REDACCIÓN: NICOLE VARELA
SIGUE LEYENDO: ¿Sabes realmente que son los trastornos de ansiedad?