La Jueza federal del Tribunal de Distrito de California Central Dolly M. Gee determinó que los Estados Unidos deberá dar albergue seguro y saludable a los niños migrantes que cruzan de forma ilegal al país y no dejarlos al aire libre, por medio de una demanda que busca dar protección a los menores que ingresan junto con sus familias al país.
En su fallo, la jueza apoyó en gran parte a los abogados que defienden el llamado ‘acuerdo Flores’, que obliga desde hace décadas al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) a brindar protección a los menores que cruzan la frontera solos, pero exime a aquellos que viajan acompañados.
La magistrada estableció que todos los niños migrantes tienen derechos, incluso si están esperando ser procesados por los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, sigla en inglés).
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Gee ordenó que los menores deben ser “rápidamente” procesados. “CBP debe dejar de retener menores al aire libre”, escribió la jueza, que exceptuó el tiempo en el que los menores esperan para ser transportados a los albergues o centros del CBP.
El fallo responde a un litigio iniciado en 2018 en respuesta a las exigencias de la orden ejecutiva que firmó el expresidente Donald Trump (2017-2021) en la que se modificaba el ‘acuerdo Flores’.
Ante la llegada masiva de familias migrantes, los abogados que defienden este acuerdo que han buscado proteger a todos los niños que hayan cruzado la frontera y se les garantice seguridad.