«Cuando los niños se hayan ido, me casaré contigo. ¿Por qué no matas ya a ambos?«, escribió en un mensaje de texto Ye Chengchen a su novio Zhang Bo. Así que, cuando Zhang Bo se quedó solo con sus dos hijos, los cogió y los arrojó por la ventana de un decimoquinto piso. El niño murió al instante. La niña, más tarde cuando se encontraba en el hospital.
Los vecinos vieron a Zhang Bo bajar corriendo las escaleras y abalanzarse llorando a los cuerpos de sus hijos. En ese momento, todos pensaron que había sido un accidente. De hecho, en su primera versión, el padre afirmó que estaba durmiendo cuando los pequeños se cayeron por la ventana.
Pero, la investigación avanzó y el hombre finalmente terminó confesando a la Policía china que había planeado el crimen junto a Ye, su pareja, que le había amenazado con cortarse las venas si no asesinaba a sus hijos. El tribunal encargado del caso pudo acceder al teléfono de ambos, donde estaban los mensajes incriminatorios. «Cuando Zhang dudó, Ye lo obligó a cometer el crimen y finalmente llevó a cabo el asesinato», dijo el veredicto.
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Zhang Bo había comenzado una relación con Ye Chengchen en 2019, cuando todavía estaba casado con su esposa Chen Meilin, de la que se divorció en febrero de 2020. En cuanto la separación se hizo efectiva, Zhang y Ye empezaron a planear el asesinato de los niños de uno y dos años. «Ye le presionó para que cometiera el crimen. Ella no quería que su futuro esposo tuviera hijos con otra mujer«, dijo la primera sentencia del Tribunal Popular de Chongqing, ratificada después por el Tribunal Supremo.
El asesinato a los menores tuvo lugar en noviembre de 2020
Siete meses más tarde, la pareja fue condenada a muerte. Este miércoles, Zhang y Ye han sido ejecutados en Chongqing, un municipio al suroeste de China.
China mantiene la pena de muerte para 46 delitos, por ejemplo, para los asesinatos, las violaciones, el tráfico de drogas y la corrupción. Pero no se conoce el número exacto de personas al año que ejecuta el país asiático porque la cifra se considera secreto de Estado y nunca se publica.