Durante muchos años, una gran cantidad de empleados del sector Salud, entre médicos, enfermeras, técnicos de laboratorios, camilleros, aseadores trabajaron con incertidumbre pues solo tenían contrato y no un acuerdo que les garantizara estabilidad.
El Gobierno del Presidente Juan Orlando Hernández envió al Congreso Nacional un proyecto de decreto luego de vetar el que el Legislativo había aprobado. Hernández manifestó que así como estaba, podía ser declarado inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
La nueva propuesta (y que se espera sea aprobada este miércoles), incluye también a todos los empleados del sector salud que no han sido contratados específicamente para combatir el covid-19, y que habían quedado afuera del proyecto de ley aprobado anteriormente por el CN.
El del Congreso Nacional solo abarcaba a los que están en primera línea contra el Covid-19.
En otras palabras, el nuevo proyecto incluye a los profesionales que trabajan en el sector salud que han sido recientemente contratados, pero también los que tienen hasta 5 años de ser empleados por contrato.
El nuevo decreto permite fortalecer aún más el sistema de Salud, creando una estructura de atención al pueblo hondureño más efectiva y de calidad, ya que aumentará considerablemente el número de médicos por personas.
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