El Ministerio Público anunció hoy que un equipo de la Fiscalía Especial de Medio Ambiente (FEMA) ha iniciado una exhaustiva inspección en el zoológico «Joya Grande».
Esta acción surge en respuesta a preocupaciones y denuncias sobre las condiciones en las que se encuentran los animales allí alojados.
El grupo encargado de la inspección está compuesto por fiscales especializados, biólogos, un ingeniero químico, un ingeniero forestal y un investigador, lo que refleja la seriedad y el compromiso de esta investigación multidisciplinaria.
El propósito principal de esta incursión es evaluar directamente el bienestar de los animales en el zoológico y determinar si existe alguna evidencia de actividades delictivas relacionadas con su cuidado y preservación.
Además, se busca identificar posibles casos de tráfico ilegal de especies, lo que constituiría un grave delito contra la fauna.
La Fiscalía regional de San Pedro Sula ha sido designada como la entidad responsable de llevar a cabo esta investigación, dado su ámbito de jurisdicción. Sin embargo, es importante destacar que la FEMA está colaborando estrechamente para brindar apoyo y expertos en la materia.
Lorena Cálix, la relacionista pública del Ministerio Público, ha enfatizado la importancia de evaluar el estado de los animales, realizar un inventario preciso de las especies presentes y abordar cualquier situación de maltrato o negligencia que se pueda identificar durante la inspección.
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Denuncias
Además de las preocupaciones sobre el cuidado de los animales, también se están investigando denuncias relacionadas con el impago de salarios a los empleados del zoológico.
Esta situación, sumada a la precariedad financiera del establecimiento, pone de manifiesto la urgencia de abordar los problemas estructurales que enfrenta Joya Grande.
Las imágenes que han trascendido, mostrando animales en condiciones de aparente descuido y desnutrición, son motivo de profunda preocupación y refuerzan la necesidad de una intervención inmediata por parte de las autoridades competentes.