Este lunes, una vez más, el servicio de transporte interurbano en el corredor entre Potrerillos y San Pedro Sula se vio paralizado debido a que varias empresas decidieron suspender sus operaciones tras recibir mensajes de extorsión.
Según informes recientes, los criminales están exigiendo sumas exorbitantes de hasta 200 mil lempiras para no poner en peligro la seguridad de las empresas y sus empleados.
Esta situación preocupante ha sumido a la comunidad en un estado de incertidumbre y temor.
En este sentido, los líderes del sector del transporte señalan que las empresas se enfrentan a una difícil decisión.
Cumplir con las demandas de los extorsionadores o poner en riesgo la seguridad de sus trabajadores y clientes al seguir operando.
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Grave amenaza
Además, los transportistas destacan que la extorsión representa una grave amenaza para la estabilidad y el funcionamiento de los servicios esenciales de transporte en la región.
Las autoridades locales y los organismos de seguridad han sido alertados sobre esta situación y están trabajando en estrecha colaboración para investigar y resolver este problema urgente.
Se espera que se tomen medidas inmediatas para garantizar la protección de las empresas de transporte y se restablezca la normalidad en las rutas afectadas lo antes posible.
Mientras tanto, los residentes y usuarios de estas rutas se ven obligados a buscar alternativas de transporte, lo que genera inconvenientes adicionales y afecta la movilidad de la población en la región.
En momentos como este, la solidaridad y la cooperación de la comunidad son fundamentales para salvaguardar la seguridad y el bienestar de todos.