La red social Bluesky, es una plataforma que cuenta con código abierto y funciones que son semejantes a las de la aplicación «X» (anteriormente conocida como Twitter) de Elon Musk, anuncio si disponibilidad para todo el público.
El proyecto dirigido por el cofundador de Twitter, Jack Dorsey, actualmente cuenta con casi 3.6 millones de cuentas creadas, aunque cabe mencionar que no todas están activas.
Una cifra que contrasta con los 130 millones de usuarios de Threads, lanzada por meta, y por los 500 millones de usuarios reportados por “X”.
Te puede interesar: Apple lanzaría la versión económica de las Vision Pro
Lee también: Logros de la NASA en la estación espacial en 2023
Pese a los desafíos, la nueva aplicación Bluesky busca poder diferenciarse por medio de su apuesta por un protocolo abierto que favorece a una mayor personalización y control por parte de sus usuarios, además de haber dado pasos recientes para agradecer y reconocer el trabajo de desarrolladores que contribuyen a su plataforma.
No obstante, poco después de abrir el registro, la red social experimentó una caída temporal debido a un alto volumen de ingresos nuevos, que sobrepasaron la capacidad de algunos servidores.
Como surgió el proyecto Bluesky
La red social seo originó en 2019 con la idea de Dorsey de establecer una red social descentralizada.
La aplicación logró separarse de Twitter en el 2021 bajo la dirección ejecutiva de Jay Gruber, después de haber surgido como iniciativa interna.
Esta independización ha sido crucial para su supervivencia, especialmente tras la adquisición de Twitter por Elon Musk.
Mientras que su enfoque en mantener una estructura abierta y descentralizada, Bluesky permite a los usuarios influir en el desarrollo de la red, adoptando o creando versiones personalizadas de la misma, un concepto que nos recuerda a otras plataformas como Mastodon.
La plataforma explica que, gracias a estas características descentralizadas, «los usuarios siempre tendrán la libertad de elegir y salir en lugar de estar sujetos a los caprichos de empresas privadas o algoritmos de caja negra».
Señalo que su objetivo es «crear un espacio que favorezca la conversación abierta» y «garantizar una experiencia segura y deseable» para sus usuarios.