La aerolínea colombiana Avianca ha presentado una solicitud para declararse en bancarrota de después de que la pandemia de coronavirus forzara la compañía a dejar sus aviones en tierra desde mediados de marzo y redujera sus ingresos consolidados en más del 80%.
Avianca, la segunda aerolínea más grande de América Latina, estimó sus pasivos entre 1.000 y 10.000 millones de dólares en una declaración ante el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York.
El impacto de la nueva pandemia de coronavirus ha dado lugar a un 90% de disminución en el tráfico mundial de pasajeros y se espera que los ingresos de la industria caigan un total de 314.000 millones de dólares, dijo Avianca.
Paralelamente a su presentación de su declaración de quiebra en los Estados Unidos, Avianca dijo que tiene la intención de comenzar a reducir las operaciones en el Perú de conformidad con las leyes locales.
La aerolínea había estado en una situación de debilidad incluso antes de la crisis. Roberto Kriete, presidente del consejo de administración de Avianca, dijo el año pasado en una reunión con los empleados que la aerolínea estaba «quebrada».
En abril, los auditores financieros de Avianca habían alertado sobre sus «dudas sustanciales» en cuanto a la capacidad de la compañía para continuar en el negocio por la crisis del COVID-19, que mantiene paralizado su negocio de pasajeros por las medidas de cuarentena para contener el contagio de la pandemia.
«Creemos que la reorganización bajo el Capítulo 11 es el mejor camino a seguir para proteger los servicios esenciales de viaje y transporte aéreo que proporcionamos en Colombia y en otros mercados en toda América Latina», añadió Anko van der Werff.