BRASIL- El presidente Jair Bolsonaro fue desplazado «informalmente» del gobierno por las Fuerzas Armadas de Brasil: sigue en funciones, pero pierde todo poder real. Lo reemplaza el general Walter Braga Neto, a quien ya mencionan como «Presidente Operativo».
La decisión habría sido tomada debido a la mala actuación de Bolsonaro durante la crisis mundial por el coronavirus.
En un comunicado del 31 de marzo, firmado por el ministro de Defensa, Fernando Azevedo e Silva y los comandantes del Ejército, la Marina y la Aeronáutica, se anunció la nueva forma de gobierno: «En cuanto dure la situación de crisis (por el impacto del Coronavirus) el Presidente Operacional de Brasil será el general (Walter) Braga Neto».
En ese comunicado se subrayó: «Esa deliberación ya fue comunicada con los debidos cuidados, a los ministros y a las principales autoridades de los Tres Poderes (Ejecutivo, Justicia, Congreso)». Y se explica que este reemplazo «operacional» se mantendrá «mientras perdure la grave situación» generada por el Covid-19.
Bolsonaro fue cuestionado por su manejo de la pandemia y su postura adversa a la cuarentena que habían apoyado los gobernadores de los 27 estados brasileños.
La explicación que corrió en la cúpula del gobierno sobre el desplazamiento, es que con este «mecanismo» se lograba reducir el grado de exposición del presidente brasileño, que había sido objeto de pesadas críticas tanto por parte del Congreso, como de todo el espectro partidario y de la prensa.
El desplazamiento de Bolsonaro de las decisiones, permitió que Braga pudiera conducir las políticas del Palacio del Planalto sobre el Coronavirus.
Braga Neto apareció este viernes en el centro de una conferencia sobre el Covid-19 en el Planalto, debutando en su nuevo rol, mientras en los medios de Brasil ya se le menciona como «Presidente Operativo».
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