INTERNACIONALES.- La Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó este viernes una resolución que otorga a su secretario general, Luis Almagro, una mayor autoridad para vigilar el proceso de transición en Guatemala, en el que el actual mandatario, Alejandro Giammattei, debe ceder el mando al presidente electo, Bernardo Arévalo de León.
La iniciativa, que contó con el impulso de Antigua y Barbuda, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos y la República Dominicana, fue aprobada por aclamación, es decir, con el aplauso de la mayoría de los embajadores que representan a los 34 países que son miembros activos de la OEA (Cuba pertenece a la organización, pero no participa desde 1962).
La resolución pide a Almagro, que viajará a Guatemala la semana próxima para hacer seguimiento a la transición, que se reúna con representantes del Ministerio Público (Fiscalía), acusado de llevar a cabo una persecución penal contra el Movimiento Semilla desde que Arévalo de León pasó a la segunda vuelta en las elecciones del 25 de julio.
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La OEA pide respetar la democracia
Específicamente, el texto le pide que traslade al Ministerio Público “la importancia de la separación de poderes” por ser “esencial para el ejercicio de la democracia” y además, que destaque que “el uso del ordenamiento jurídico como una herramienta para intimidar y cambiar indebidamente los resultados electorales no es aceptable”.
Este mismo lunes, el Registro de Ciudadanos del Tribunal Supremo Electoral de Guatemala suspendió de manera provisional el partido de Arévalo de León, el Movimiento Semilla, un dictamen sin precedentes que ha creado una situación de incertidumbre y que ha hecho que expresen serias preocupaciones varios países, incluido EEUU, Canadá, Chile y Bolivia.
Además, el miércoles, el Congreso de Guatemala acordó no reconocer a la bancada del Movimiento Semilla por orden del juez penal Fredy Orellana, acusado de socavar la justicia y de corrupción por el Departamento de Estado de EEUU.
Arévalo de León, cuya principal promesa es erradicar la corrupción del Estado, ganó la Presidencia para el periodo 2024-2028 en la segunda vuelta electoral del pasado 20 de agosto con 2,5 millones de votos a su favor y superando por 21 puntos porcentuales a su rival, la ex primera dama Sandra Torres Casanova, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).
Redacción: JT