El secretario de Seguridad Nacional informó sobre las nuevas medidas que endurecerán los requisitos de asilo para los migrantes irregulares.
INTERNACIONALES.– La implementación del llamado Título 42, una restricción fronteriza de salud pública que empezó a regir desde la pandemia de covid-19, terminó este jueves.
«El fin del Título 42 no significa una frontera abierta, sino todo lo contrario», informó el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas.
Además, detalló las medidas ya anunciadas para hacer frente a la migración irregular, que entrarán en vigor a partir de hoy, viernes 12 de mayo con el Título 8, bajo el que serán inelegibles para asilo los migrantes que lleguen a la frontera sin cita previa y sin que se les haya negado protección en un tercer país.
Según las nuevas condiciones y a diferencia del Título 42, quienes sean expulsados a partir del viernes deberán esperar cinco años para volver a pedir asilo en EEUU y podría enfrentar un proceso penal si intenta cruzar nuevamente.
«Nuestro enfoque general es construir vías legales para que las personas vengan a los Estados Unidos e imponer consecuencias más duras a quienes opten por no utilizar esas vías», insistió Mayorkas.
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Con la nueva regla, las autoridades estadounidenses buscan alentar a los miles de migrantes que realizan la peligrosa travesía a utilizar maneras “legales, seguras y ordenadas” y a la vez endurecer los requisitos para el asilo en frontera.
“Estamos dejando muy en claro que nuestra frontera no está abierta, que cruzar irregularmente es ilegal y que aquellos que no son elegibles para el asilo serán devueltos rápidamente. No escuches las mentiras de los contrabandistas. Esto es lo que te pasará: serás devuelto”, enfatizó Mayorkas.
La nueva regla “supone que aquellos que no usan vías legales para ingresar a los Estados Unidos no son elegibles para el asilo y nos permite expulsar a personas que no establecen un miedo creíble de persecución en el país de expulsión”, detalló Mayorkas.
El secretario de Seguridad Nacional especificó que entre las “circunstancias limitadas” bajo las que se aceptará una petición de asilo estarán las personas que “han utilizado nuestras vías legales”, es decir, que hayan programado una cita con las autoridades de inmigración a través de la aplicación CBP One, y quienes “hayan solicitado asilo, o protección en otro país, por el que han transitado y les fue denegado”.
Esta última regla limita a la gran mayoría de los migrantes, pues establece que fuera de los aspirantes de asilo originarios de México, que limita con EEUU, el resto tendrá primero que pedir asilo en un tercer país en ruta a territorio estadounidense y recibir una negativa, antes de continuar camino.
Sin embargo, la vía que más recomiendan las autoridades estadounidenses es la programación de citas a través de CBP One, que en sus “primeros cuatro meses ayudó a 83.000 personas a programar una cita en un puerto de entrada”, informó Mayorkas.
Mayorkas también anunció que enviarán más personal a la frontera sur, entre ellos más de 1.400 funcionarios del DHS, 1.000 coordinadores de procesamiento y 1.500 efectivos adicionales del Departamento de Defensa, que permitirán que los agentes fronterizos “se concentren en su misión crítica”.
“Estamos cumpliendo con consecuencias más duras para la entrada ilegal, incluida la devolución y expulsión de más de 665.000 personas durante la primera mitad de este año fiscal. Estamos realizando docenas de vuelos de remoción por semana y continuamos aumentando nuestra capacidad de vuelos de remoción”, insistió el secretario de Seguridad Nacional.
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El miércoles, 10 de mayo, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), coordinó desde El Paso, Texas, dos vuelos de repatriación en los que expulsaron a cientos de personas hacia Guatemala y Honduras.
Un portavoz de ICE en el lugar confirmó que en cada uno de los vuelos iban hasta 135 personas que estaban bajo custodia de CBP y fueron procesadas bajo el Título 42. Según se informó, estos llevaban aproximadamente 72 horas en detenidos en diferentes puntos del país y ninguno formó parte del grupo de migrantes que se entregó a las autoridades ese mismo miércoles, en El Paso.
Cada semana, ICE realiza hasta 66 vuelos de repatriación en todo EEUU, un número que esperan continúe según la demanda después del jueves con mayor frecuencia a países de Centroamérica y otros en Suramérica como Colombia y Perú.
Según cifras oficiales, aproximadamente 1,4 millones de personas fueron regresadas o fueron expulsadas de los EEUU en el 2022.
Al mismo tiempo, más de 100.000 personas de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela han llegado legalmente a través del programa de parole humanitario implementado por EEUU, lo cual provocó la reducción de los encuentros fronterizos de estos grupos en un 90 %.
Por su parte, EE. UU. comenzará una nueva campaña de información digital en América Central y del Sur “para contrarrestar las mentiras de los contrabandistas con información precisa sobre las leyes de inmigración”.
Además, Mayorkas informó que como parte de una campaña “sin precedentes” han arrestado a casi 10.000 contrabandistas o “coyotes” que se benefician de inmigrantes vulnerables, teniendo en cuenta que “es un desafío regional que requiere una solución regional”.
REDACCIÓN: ÁNGELES OCHOA