La esposa de Oropesa, Divimara Lamar Nava, había negado conocer el paradero de su cónyuge lo que entorpeció el proceso, fue capturada este miércoles, 3 de mayo.
NACIONALES.- La Oficina del Sheriff del condado de San Jacinto (Texas) anunció en la mañana del miércoles el arresto de varias personas vinculadas con el tiroteo que acabó con la vida de cinco hondureños, el pasado fin de semana en la localidad de Cleveland.
Horas antes fue capturado, Francisco Oropesa, de 38 años, que estaba “escondido en un clóset debajo de ropa” en una casa a unas 16 millas de donde había baleado a sus vecinos. Se entregó sin oponer resistencia tras ser localizado gracias a una pista recibida.
Entre los detenidos anunciados este miércoles se encuentra la esposa de Oropesa, Divimara Lamar Nava, de 53 años, que fue arrestada a primera hora por la policía estatal en una casa situada en el área de Conroe, en el condado de Montgomery, de acuerdo con los registros carcelarios.
La mujer, que había negado conocer el paradero de su esposo, estaba acusada de un cargo de delito grave de obstaculizar la detención o el enjuiciamiento de un delincuente.
El sheriff adjunto, Tim Kean, había explicado previamente en una rueda de prensa este miércoles que uno de los vehículos avistados en el lugar de la masacre estaba registrado a nombre de la esposa.
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🚨 Arrestan a la esposa del asesino Francisco Oropesa, por obstaculizar su captura por la masacre de Texas, donde murieron cinco hondureños. Divimara Lamar había negado conocer el paradero de Oropesa, quien fue capturado escondido en un clóset bajo la ropa pic.twitter.com/QnBGLnDEic
— Radio Cadena Voces (@RCVHonduras) May 3, 2023
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Los medios locales informaron, que hay cuatro nuevos arrestos tras la detención de Oropesa. Las autoridades locales no han confirmado esta cifra ni han revelado las identidades del resto de detenidos por la masacre.
“Las personas arrestadas no nos están diciendo mucho. Cualquiera que ayude a este maníaco definitivamente tiene algún tipo de problema en lo que a mí respecta”, dijo Kean, que agregó además que creen haber encontrado el arma asesina, pero aún esperan las pruebas de balística para confirmarlo. También señaló que a lo largo de la mañana un juez acudirá a la cárcel del condado para fijar en cinco millones de dólares la fianza de Oropesa, un inmigrante indocumentado de origen mexicano, quien posiblemente será acusado de cinco cargos de homicidio.
Entre tanto, Kean defendió durante la rueda de prensa la actuación policial, tras las críticas de familiares de las víctimas por la demora en responder a sus avisos ante el tiroteo inminente. Según la Oficina del Sheriff, los agentes llegaron en 14 minutos, un plazo «excelente», dijo Kean.
“Este no es un condado rico. Tenemos tres agentes patrullando para cubrirlo todo. Si vas desde el norte del condado hacia el interior, que es donde ocurrió esto, es una hora manejando”, declaró Kean.
“La primera llamada era sobre alguien que había disparado un arma en su patio trasero”, dijo el sheriff adjunto. En el mismo momento las autoridades también recibieron la llamada sobre un robo con agravantes, que fue considerada prioritaria inicialmente, dijo.
REDACCIÓN: ÁNGELES OCHOA
