Mundo.- La Organización de las Naciones Unidas (ONU), condenó la represión militar tras el fallecimiento de más de 18 manifestantes en Birmania durante la manifestación de este domingo, que siguen pronunciándose en contra del Estado ocurrido el 1 de febrero.
La protesta de este fin de semana se considera como la más sangrienta desde que se llevó a cabo el golpe de Estado el 1 de febrero.
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La ONU está declarando que el ejército birmano no está haciendo caso de las advertencias internacionales donde piden que moderen sus estrategias a la hora de detener las protestas. Asimismo, la organización ha recibido por parte de sus fuentes, testimonios de asesinatos, maltratos hacia los manifestantes y tortura hacia los ciudadanos que protestan a nivel nacional hasta torturas hacia los prisioneros.
Siempre sobre este tema, la junta militar impuso de carácter urgente la ley marcial en dos áreas pobladas de Yangon.
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Desde que los militares derrocaron a la líder civil Aung San Suu Kyi, se ha reportado más de 80 muertos, dicha suma aumenta con las víctimas reportadas este domingo.
Según los creadores del golpe de Estado, se realizó esta acción al alegar de que hubo fraude en las elecciones el mes de noviembre el año pasado.
Siempre en Birmania, El Reino Unido sugiere a sus ciudadanos que se vayan de Birmania por medios comerciales.
Los ciudadanos de Birmania protestan por el golpe de Estado, exigiendo a los militares que restablezcan la democracia a la vez de que respeten los resultados y que liberen a los manifestantes que han terminado presos por manifestarse en las calles.
Otra víctima de la represión militar es el periodismo, cuando en el mes de marzo del presente año, la junta militar canceló la licencia a cinco medios de comunicación independientes que han estado pendientes de las manifestaciones a raíz del golpe de Estado.