Tegucigalpa, Honduras.- Pese a que la escasez de banano deja 4 mil desempleados el país no se puede detener en la exportación de la fruta por lo que se está adquiriendo de cosechas extranjeras para salir con el compromiso de exportación, manifiesta el presidente de la Asociación de Productores de Banano Independientes del Valle de Sula, Héctor Castro.
El 82 por ciento de las cosechas plantadas en Valle de Sula se perdieron con la llegada de los huracanes ETA e IOTA ya que las fincas bananeras resultaron inundadas por las lluvias según las declaraciones de los productores, quienes manifiestan que la exportación no puede parar por lo que han tenido que comprar banano a Costa Rica, Guatemala y Panamá”.
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Castro manifestó que han comprado bananos a precios elevados
“No se puede parar, lo poco que quedó es incipiente para la demanda nacional, por eso nos está entrando banano de Costa Rica, Guatemala y Panamá”.
“De Guatemala entra más y carísimo. Ahora mismo estamos sin banano y lo más grave es que más de 4,000 empleados están suspendidos”, apuntó.
La suspensión de los 4 mil empleados en este rubro es algo histórico señaló el representante y dijo que se debe a la crisis que provocó la llegada de los fenómenos naturales y no tanto la pandemia.
Pese a que Honduras es muy reconocida por exportación de bananos, se ve obligada a importar la fruta por factores relacionados al cambio climático, lo que clasificó como un hecho histórico.
Por su parte el ministro de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), Mauricio Guevara, manifestó que la exportación llegara al punto de decaer.
Definitivamente el tema de las exportaciones va a decaer, pues el ciclo del banano no es igual al de una hortaliza, ya que anda de 9 y hasta 12 meses su cosecha”.
Añadió que la recuperación del cultivo en las plantaciones de banano no será en un corto plazo.
El banano es uno de los mayores generadores de divisas en el país por ser de los cultivos más importantes después del café por su generación de empleo.
Varios productores manifestaron que necesitan aproximadamente un año para recuperarse ya que es necesario volver a cultivar las fincas desde cero.