Estados Unidos-. Este martes el país norteamericano reportó su mayor número de muertes en lo que va de la pandemia de la COVID-19, con más de 4,320 muertes por este virus.
La semana pasado Estados Unidos registro alrededor de 3,300 muertes, que esto muestra un aumento de 217 por ciento, desde noviembre.
Las cifras son alarmantes, pero, para algunos expertos no son sorprendentes. Llegan después de los repentinos aumentos de casos de covid-19, impulsados por reuniones festivas, en todo el país y luego de semanas con cifras mayoritarias de hospitalizaciones.
Como consecuencia más de 131.300 estadounidenses están hospitalizados con el virus, según el Proyecto de Seguimiento COVID, y en algunas partes del país, los hospitales han llegado a su punto de quiebre.
El Estado de Arizona reportó un récord de 5.082 pacientes hospitalizados con covid-19 el martes y el mismo día rompió un segundo récord: más de 1.180 pacientes con el virus en camas de unidades de cuidados intensivos (UCI).
En el Estado de Luisiana, el gobernador John Bel Edwards extendió una orden que mantiene las medidas de mitigación de covid-19 en vigencia durante casi un mes más. Dijo que el estado estaba experimentando un «gran aumento» en los casos y las hospitalizaciones.
Esas cifras también están aumentando en las ciudades universitarias a medida que los estudiantes regresan para el primer semestre de 2021.
La inscripción a tiempo completo en institutos de educación superior representa más de una cuarta parte de la población en 30 condados de EE.UU., según el Centro Nacional para Estadísticas de educación. Las infecciones aumentaron en 26 de dichos condados durante una semana, en un promedio del 50 por ciento.
Y al menos el 90 por ciento de las camas UCI con personal están ocupadas en 10 de los condados, incluido el condado de Oktibbeha, donde encuentra la Universidad Estatal de Mississippi, y en el que casi todas las camas UCI están ocupadas por pacientes con covid-19.
También el martes, el secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, anunció que el Gobierno federal ya no retendrá las dosis de la vacuna contra el covid-19 que mantenía en reserva y alentó a los estados a ampliar la vacunación a más personas.
«Les decimos a los estados que deben ampliar las vacunas a todas las personas de 65 años o más y a todas las personas menores de 65 años con una comorbilidad con algún tipo de documentación médica», manifestó Azar.
Hasta el momento se han distribuido más de 27,6 millones de dosis de vacunas, según datos de los CDC, y más de 9,3 millones de personas han recibido su primera dosis, muy lejos del lugar en el que algunos expertos esperaban que el país estuviera en este momento.
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