Así lo informó el popular astrofísico Neil deGrasse Tyson, quien agregó que la roca es del tamaño de una refrigeradora y tiene el nombre de 2018VP1, esta se acerca al planeta a 34.200 km/h, pero no es demasiado grande como para causar daño, señalan los expertos.
El asteroide es vigilado por la Nasa desde 2018 tras su observación y análisis de que no representaba un riesgo para la Tierra.
De acuerdo con NASA, la probabilidad de que la roca entre a la atmósfera es de 0,41%, pero si pasa, se desintegraría por ser muy pequeño (cerca de dos metros).
Para la Nasa lo más probable es que el asteroide pase a 500.000 km de la Tierra, por esa razón, deGrasse ha bromeado de que, si el mundo se acaba en 2020, no sería culpa del universo, en referencia a las elecciones del día después.