El cónsul de Turquía en Honduras, Adolfo Facussé, afirmó que el FBI y el gobierno turco andan tras la pista del guatemalteco, Axel López, intermediario en la compra de siete hospitales móviles para la emergencia nacional por COVID-19 en Honduras.
«En Turquía hay una orden de detención para Axel López, en Estados Unidos quien anda detrás de él es el servicio de impuestos sobre la renta para ver si hay un fraude cometido por dólares depositados en bancos norteamericanos que estén sujetos a la jurisdicción de la FBI», recalcó.
Asimismo, informó que la empresa Vertisa Cevre Teknolojileri Ins., que elaboró los hospitales móviles está siendo intervenida por el gobierno de Turquía porque hicieron una documentación de embargue falsa tratando de evitar pagar el impuesto de importación.
«Esa es una falta gravísima por la cual pueden meter a la cárcel a los responsables», dijo Facussé.
Escuche la entrevista EXCLUSIVA de Adolfo Facussé para Radio Cadena Voces
Además, Facussé señaló que el señor López no es una figura desconocida en el país ya que recientemente nombró a dos «amigos» como encargados para instalar los hospitales ya que no pudo traer técnicos desde Turquía.
«Este señor es amigo de un grupo de personas que han estado muy metidas con la gente de Gobierno y que han nombrado las más altas autoridades del país», agregó.
El cónsul lamentó que, aunque Elmed Medicals hizo una advertencia al gobierno de Honduras que estaba comprando un fraude, las autoridades no hicieron nada para evitar «la estafa».
Facussé fue enfático y dijo que el Gobierno de Honduras no tienen ningún interés en averiguar cómo fue la compra de los siete hospitales móviles.
«Es una solemne estafa en la que cayó el gobierno de Honduras por instrucciones del señor presidente de la República que dio la orden de comprar los hospitales, de INVEST-H que no hizo la investigación que las empresas no están calificadas ni certificadas para hacer esos hospitales», concluyó.
MIRA: MP concluye con inspección de contenedores que traen dos hospitales móviles